Según un artículo de investigación la ciudad de Ushuaia es una de las primeras del mundo en poder hacer cierto el sueño del hombre moderno: que las calles ya vengan con sus propios pozos inteligentes y que como agregados ya tenga sus propios contaminantes incorporados, en este caso serían botellas de vidrio no reciclado.
En el boletín informativo del MIT-TDF se amplía: “los pozos inteligentes son extraordinarios porque uno ya puede ponerlos en google maps y esquivarlos siendo así mucho más fácil. También el tema de las botellas: no se ponen campanas de reciclaje en un lugar que no tiene ningún sentido. Por eso la calle Las Lajas es un caso testigo a nivel mundial”.